domingo, 28 de febrero de 2010

Yo contigo, tú sin mí.

Él sabe que no puede vivir sin ellas, al contrario que ellas, que sí que pueden prescindir de nosotros... porque nosotros, a veces las tratamos como no deberíamos, solo por no dejarlas escapar, porque las queremos.

Querer sí, pero sin obsesionarse.

Se sentía solo...


Vagaba por las calles, solo, y sin nadie que le acompañase.
Él seguía pensando en ella, por qué no estaba ahora a su lado? por qué se había ido?
Ahora lo único que él quiere es estar solo, pensativo, y en el sitio dónde la conoció. Él piensa que sin ella no es nada, y por eso vuelve al lugar conocido como frío y sombrío...
Al salir de su sitio, vio que todo estaba como antes, que nada había cambiado todo ese tiempo de pensamientos, que sus amigos le apoyaban, y que podía contar con ellos. Intentó olvidarse de ella, conociendo a otra, y pensando en amarla como llegó a amar a su chica anterior.
Pasado el tiempo vio que no funcionó, él seguía pensando en la misma persona. Tras pensar de qué sirve seguir pensando en ella, si no está y no va a volver, y por eso lo que busca es la diversión y olvidarse de ellas, de las chicas.

Siempre estarás ahí, aunque no quiera.